“EL DEBATE”
Por más de un siglopreparamos estudiantes para que fueran capaces de entender instrucciones,asimilarlas y cumplirlas, para poder repetir sistemas y desarrollarmetodologías. Ahora debemos prepararlos para el debate, para estructurar formasde pensamiento, sustentarlas, articular y poder adaptar estas visiones a unmundo y una sociedad en permanente cambio.
Un ingredientefundamental de esta cultura de debate es la pluralidad. La apertura constante adiversas formas de pensamiento, creencias, ideologías, posiciones políticas oculturales. El mundo en el que vivirán –en el que viven ya- es crecientementeglobalizado, interconectado, sin distancias, fronteras o barreras geográficas.Por ello es vital elaborar una estructura de pensamiento amplio, muy abierto,múltiple, que nos permita entender distintas formas y hábitos lingüísticos,culturales, gastronómicos, políticos, históricos.
Pensemos que en 10 años–según afirman algunos futurólogos- cerca del 25 por ciento de la poblaciónmundial trabajará con y para una empresa o corporación china. Nuestros jóvenesdeben estar preparados para contar con la habilidad de pensamiento flexible,adaptable y capaz de debatir con muy diferentes posturas. Escuchar, dialogar,respetar como ejes de la formación en el debate y la cultura de la pluralidad.
La solución de conflictoses parte fundamental de esta línea de debate, cómo utilizar los argumentos, lasrazones y la apertura de posiciones e ideologías, para resolver conflictos,construir diálogo y entendimiento.
Aportaciones agudas deLeonardo Kourchenko y de Pedro Landaverde que han sido plasmadas en el “Desafíodel Docente en el Siglo XXI”.
Debemos entender eldebate más como una forma de articular y estructurar una línea de pensamiento,que como una facultad discursiva o parlamentaria. La búsqueda del conocimiento,la investigación y el aprendizaje continuo.
“Eldebate permanente es el único antídoto contra la manipulación de la opinión”
AlbertJacquard